DESCUBIERTA LA MOMIA DE HATSHEPSUT

Una muela ha conseguido desvelar uno de los grandes enigmas que todavía quedaban pendientes en la egiptología: el paradero de la momia de la reina Hatshepsut.

Zahi Hawass, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades, informó que la momia, que se creía desaparecida hasta el día de hoy, se encontraba "extraviada" en el tercer piso del museo egipcio de El Cairo.

Hawass explicó que supo que la momia, de cuerpo presente durante la rueda de prensa, y a la que le falta un diente, era la de la reina cuando vio que una muela, encontrada en una caja con vísceras de Hatshepsut, se adaptaba a su dentadura.

Hatshepsut , hija de Tutmosis I, esposa de Tutmosis II y madrastra de Tutmosis III, fue la reina-faraón que gobernó durante más tiempo (1.502-1.482 A.C.) en el Antiguo Egipto.

La momia de Hatshepsut fue una de las dos halladas en 1903 por el arqueólogo Howard Carter, descubridor de la tumba de Tutankhamon en 1922, en la tumba 60 del Valle de los Reyes, y que más tarde se llevó al museo egicpio.

En esa tumba, los arqueólogos encontraron una momia en un sarcófago identificada como los restos de Sitra, la mujer que amamantó a Hatshepsut. Junto a Sitra, había una momia en el suelo, que nadie pudo identificar, aunque "tenía el brazo izquierdo doblado sobre el pecho, indicativo de que pertenecía a la realeza", apuntó Hawass.

Nada volvió a saberse de esa momia desconocida hasta que Hawass se fijó en ella, buscando momias reales, y decidió analizarla en un escáner junto con los restos de la nodriza y los de otras dos momias encontradas en una tumba en el templo de Deir El Bahari.

Hace años, la difunta arqueóloga alemana Elizabeth Thomas ya sostuvo que la misteriosa momia pertenecía a Hatshepsut, pero se encontró con la negativa de los arqueólogos egipcios encabezados por Hawass.

Hawass ordenó realizar unas pruebas que revelaron que los restos no identificados de la tumba 60 correspondían a los de una mujer, de unos 50 años, con sobrepeso y que posiblemente murió de un cáncer. Además, se descubrió que a esa momia le faltaba un diente.

La última pieza del puzzle ha sido una caja de madera con el nombre del trono de Hatshepsut, hallada en la tumba Deir El Bahari con vísceras -un estómago y un hígado- y una muela.

Los arqueólogos egipcios hicieron varias prueba a la caja y concluyeron que los restos correspondían a la faraona. Así, comenzó la búsqueda de la dueña de la muela. El equipo científico probó en cada una de las cuatro momias sometidas a pruebas y descubrió que Hatshepsut era la momia desconocida de la tumba 60.

Link de fotos de la momia de Hatshepsut:

http://www.elmundo.es/albumes/2007/06/27/hatshepsut/index.html