sábado, 22 de mayo de 2010

UNA NEVERA DE CAMPING SALVA A TRES NAUFRAGOS

Dos hermanos norteamericanos y una amiga de ellos han sobrevivido durante tres días flotando en alta mar en una nevera de camping. Un pescador les encontró a 50 kilómetros de Florida (USA).

Los tres náufragos salieron a pescar, pero lo que iba a ser un entretenido día en el mar se ha convertido en una pesadilla, de la que, por suerte, han logrado despertar.

El barco en el que los tres protagonistas de la historia estaban pescando fue sorprendido por un golpe de mar que los tiró al agua. Una segunda ola se hundió y los tres quedaron a la deriva en alta mar.

El único bote salvavidas que lograron encontrar fue una nevera de camping y ahí han pasado tres días flotando sin rumbo y sin chalecos salvavidas.

Un pescador los encontró a 50 kilómetros de Florida. Los tres sufrían deshidratación, estaban abrasados por el sol y tenían decenas de picaduras de medusa por su cuerpo. Sin duda, tuvieron mucha suerte.

12 comentarios:

Lourdes dijo...

Pues ya ves... Han vuelto a nacer, eh?

Besos, Fernando!
Buen finde!!

Liova dijo...

Esta es una de esas cosas raras que pasan en la vida y que siempre pensamos que a nosotros no nos puede pasar. EQUIVOCADOS ESTAMOS.BESITOS Y SALUDITOS DESDE CÁCERES.

Genín dijo...

Dentro de su mala suerte, al final les cambió la cosa, tuvieron suerte y salvaron la vida...
Salud

Lara dijo...

Pues ya ves, volvieron a nacer.
Muuuuuacks!

Mish dijo...

Que feo....

Yo no se que haría si estuviera en una situación como esa...debe ser traumante..

Besos!

Winnie dijo...

Tremendo!! La vida les dió una segunda oportunidad...bss

Antero dijo...

Tres días con una nevera como único punto de apoyo no debe ser fácil pasarlos, lo que tuvo que pasar por sus cabezas...

saludos

Concepción Rozalén dijo...

Ya hay que ser como McGyver para salir de acampada. Saludos.

Anónimo dijo...

A éstos NO les tocaba morir todavía!

Balovega dijo...

Hola y buenas noches...

Paso a desearte un buen domingo.. felices sueños con un beso.

PD. Últimamente vengo poco, el trabajo me tiene atrapada...

Javier dijo...

Un día de pesca se convirtió en un día... de suerte.

Un saludo

Miguel dijo...

A veces, por menos, por muchísimo menos, la gente no lo cuenta, y en esta ocasión, pues ya ves... La cosa salió bien.

Un abrazo.