Una mujer desempleada que ha ocupado ilegalmente durante seis años una mansión en un elegante barrio de Bruselas (Bélgica) tendrá que mudarse, después de que la pasada semana el inmueble se vendiese en subasta pública por 2,36 millones de euros.
"Es bastante, incluso para una casa de cuatro dormitorios, tres cuartos de baño, cuatro garajes, una piscina, jacuzzi y una vivienda para el conserje", aseguró la "okupa" Danielle Vandevelde. Hace seis años, Vandevelde alquilaba una casa a medio kilómetro de la mansión, que descubrió mientras buscaba a su perra que se había escapado. El edificio estaba tan cubierto de maleza que "apenas se podía ver el garaje" y el jardín de 50 áreas "parecía una jungla", recuerda.
Después de recabar información, averiguó que la casa llevaba ocho años abandonada. Había pertenecido a un ciudadano ruso y, cuando éste fue asesinado, pasó a ser propiedad del Estado belga. A renglón seguido, dejo su vivienda y se instaló allí.
La "okupa" no encontró problemas para conectar la electricidad y el agua, pues ningún vecino protestó, e incluso consiguió registrar la lujosa casa como su residencia fija. "Gracias a mí, el sitio no es una ruina y yo me he ahorrado una suma significativa de alquiler", presumió.
Seis años después, tendrá que abandonar su hogar tras la venta del inmueble, aunque confía en encontrar "pronto un nuevo alojamiento, dado que hay tantas casas abandonadas". Vandevelde no se siente una "okupa": "una casa se conserva mejor cuando es habitada, me considero más bien una conserje".